“Anónimo” consta de cinco piezas escultóricas que componen una instalación de arquitectura efímera. Hacemos protagonista al vidrio como material principal de la instalación ya que nos permite reinterpretar la técnica empleada por Cezanne de una manera contemporánea. Incorporamos la verticalidad y horizontalidad de la obra de Cézanne. El desdibujo de la vegetación y la transparencia la obtuvimos a través de diferentes planos de piezas de vidrio texturizado y sutiles toques de color que unificaban la instalación.
“Anónimo” invita al visitante a desplazarse entre las piezas para que, a través de los materiales, palpe las texturas evocando un sentimiento de curiosidad y contemplación que permita al espectador caminar en un entorno descontextualizado.
La propuesta cuenta con un factor sorpresa, la instalación vista como un todo desde un punto de vista concreto, se fragmenta a medida que el espectador camina entorno a las piezas, lo que genera diferentes texturas, reflejos y juegos de planos, líneas y luces, convirtiendo a la instalación en una obra de arte vivo.